¡No te compliques si la puerta de tu heladera no cierra bien! Aquí te explicamos cómo solucionarlo.

Posibles causas:
- Burlete de la puerta dañado: El burlete es la goma que sella la puerta de la heladera. Si está dañado, el aire caliente entrará en el interior y la heladera no podrá mantener la temperatura adecuada.
- Bisagras desalineadas: Si las bisagras de la puerta están desalineadas, la puerta no cerrará correctamente.
- Nivelación incorrecta de la heladera: Si la heladera no está nivelada, la puerta puede no cerrar bien.
- Obstrucción en el cierre: Puede haber algún objeto que impida que la puerta cierre correctamente.
Acciones a seguir:
- Revisa el burlete: Inspecciona el burlete de la puerta en busca de daños o desgaste. Si está dañado, reemplázalo por uno nuevo.
- Ajusta las bisagras: Si las bisagras de la puerta están desalineadas, puedes ajustarlas con un destornillador.
- Nivela la heladera: Utiliza un nivel para asegurarte de que la heladera esté nivelada. Si no lo está, ajusta las patas de la heladera.
- Revisa si hay obstrucciones: Busca si hay algún objeto que impida que la puerta cierre correctamente.
Posibles soluciones:
- Reemplazar el burlete de la puerta.
- Ajustar las bisagras de la puerta.
- Nivelar la heladera.
- Retirar la obstrucción que impide el cierre de la puerta.
Recomendación:
Si no puedes solucionar el problema por tu cuenta, te recomendamos que llames a nuestro servicio técnico especializado en heladeras de todo tipo. Contamos con técnicos altamente calificados y con experiencia en la reparación de todo tipo de heladeras. Ofrecemos un servicio rápido, eficiente y con garantía.
¡No te quedes sin tu heladera! Llámanos hoy mismo y te ayudaremos a solucionar el problema de la puerta que no cierra bien.